El océano Atlántico es, después del Pacífico, el segundo más grande del
mundo. Su punto más profundo es la Fosa de Puerto Rico, que se encuentra
en el límite entre el Atlántico y el mar Caribe, y tiene más de 8.400
mts de profundidad en su punto más hondo.
El punto más bajo de la superficie de la corteza terrestre, las Fosa de las Marianas, se encuentra en el Pacífico.
El fondo del océano a la cuenca del Pacífico es relativamente uniforme,
con una profundidad media de unos 4,270 metros. Las irregularidades más
grandes del área son picos submarinos de pendientes muy pronunciadas y
cimas planas, conocidas en inglés como seamounts. La parte oeste del
suelo consiste en arcos montañosos que se alzan sobre el mar como grupos
de islas, como las Islas Salomón y Nueva Zelanda, y fosas profundas,
como la de las Marianas, o de las Filipinas, y la de Tonga. La mayoría
de las fosas profundas son adyacentes a los márgenes exteriores de la
amplia plataforma continental occidental.
A lo largo del límite este de la cuenca Pacífica está la cordillera
Pacífica Este, que es una parte de la cordillera oceánica central. Con
una anchura de unos 3000 km, tiene una altura de unos 3 km sobre el
suelo marino adyacente.
Debido a que un área relativamente pequeña drena al Pacífico, y debido
al tamaño inmenso del océano, la mayoría de los sedimentos son
autigénicos o pelágicos en su origen. Los sedimentos autigénicos
incluyen montmorillonita y filipsita. En cambio los sedimentos pelàgicos
derivados del agua del mar incluyen arcillas rojas pelágica y restos
calcáreos de vida marina. Los sedimentos terrígenos están confinados en
márgenes estrechos marginales cerca de tierra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario